Extrañó que la humedad quebrada
al pisar la escarcha sobre la hierba
aumentara la voz de la soledad,
una sordera por carencias de eco.
Las caricias del viento casi helado
recordaron la ausencia de caricias
y cada remolino en la hojarasca,
un recuerdo más y más inconcreto.
Naturalezas caducas y estoicas
que así perecen para sobrevivir
le ofrecieron en cada contemplación,
raices ocultas, Sísifos inciertos.
Mordió, al vuelo, un pedazo de aire,
masticó las piedras y las palabras
relamió los restos de cada encía,
y, a conciencia, vomitó sus versos.
A Isabel Lizarán, con agradecimiento por su amor a la Palabra.
Fue una alegría volver a verte.
Kostas Vidas a 3 de Noviembre del 2008
Las fronteras invisibles
Hace 3 años
9 comentarios:
Un traguito de sidra y saludos de mi parte si la vuelves a ver.
En la poesía hay siempre algo de mala digestión, algún hueso que no se deja triturar del todo.
Gracias por tu visita.
Saludos.
Las palabras fluyen y hacen pensar. Que mas podemos esperar de un poema...
Un fuerte abrazo
Buenas palabras... quien pudiera expresarse así.
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/es/deed.ca
Este es el link per al creative comons del copyright. Si tens cap problema m´ho dius Rubén.
Perdona no enviar-t´ho al mail però no el trobava.Ja parlem
Un abraç
Roger
Kostaki te echamos de menos, vuelve
Kostas, ¿y las blogomemorias? Oh, oh, me diste el dulce y me lo has quitado! Igual te mando un beso y mis deseos de que tengas un buen año! (Seguiré esperando)
Enhorabuena por tu blog...me gusta lo que haces y como lo dices...un abrazo desde azpeitia
No importa de donde llegue la musa
No importa què materia degluta el poeta
terrenal o celeste
infernal o còsmica
mastica aùn en contra de su propio designio
y sòlo a conciencia lo vomita
afuera
a que le pegue
al que le cabe.
Pues a mì me cupo tu poema
magnìfico,por cierto.
me he leìdo aquì de todo un poco.Seguirè.
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