Auténtico puente entre el blues y el rock tal y como lo conocemos hoy, creador del "jungle sound", discípulo de John Lee Hooker, y padre artístico de una masa bigeneracional de músicos entre la que se incluyen los Animals, Who, Yardbirds, Rolling Stones o Clapton; Bo diddley(1928-2008), ya no está entre nosostros. Podeis encontrar infinidad de obituarios en la red. Simplemente me gustaría decir que al enterarme sufrí un revolcón de nostalgia.
Cuando alrededor de los doce años, a mi amigo Ponniboy y a mí nos entro la fiebre rocker, caminábamos por los dos únicos y pequeños jardines de mi pueblo que nada tiene que ver con las orillas del Mississipi. Llevábamos un viejo radiocassete a pilas que mordía las cintas en cuanto nos descuidábamos. Su cuñado Ramón y su amigo Carlos eran casi héroes porqué nos grababan nuevas cintas de sus preciados vinilos. Así conocimos a Elvis, Cochran, Buddy Holly, Bo Diddley y muchos otros. Nos sentábamos en un banco y escuchábamos una y otra vez. Esas fueron nuestras tardes durante meses. El tupé se nos caía nada más salir de casa, a mí más que a él, y las chicas no nos hacían ni puto caso. Que más decir. Era tan fácil ser feliz. Ahora escucho, como si fuera una despedida, aunque se que la escucharé mil veces, Hey! Bo Diddley, ¿y sabes qué, Ponniboy?, me acuerdo de ti, viejo.
A L.M.Sáez
Cuando alrededor de los doce años, a mi amigo Ponniboy y a mí nos entro la fiebre rocker, caminábamos por los dos únicos y pequeños jardines de mi pueblo que nada tiene que ver con las orillas del Mississipi. Llevábamos un viejo radiocassete a pilas que mordía las cintas en cuanto nos descuidábamos. Su cuñado Ramón y su amigo Carlos eran casi héroes porqué nos grababan nuevas cintas de sus preciados vinilos. Así conocimos a Elvis, Cochran, Buddy Holly, Bo Diddley y muchos otros. Nos sentábamos en un banco y escuchábamos una y otra vez. Esas fueron nuestras tardes durante meses. El tupé se nos caía nada más salir de casa, a mí más que a él, y las chicas no nos hacían ni puto caso. Que más decir. Era tan fácil ser feliz. Ahora escucho, como si fuera una despedida, aunque se que la escucharé mil veces, Hey! Bo Diddley, ¿y sabes qué, Ponniboy?, me acuerdo de ti, viejo.
A L.M.Sáez
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